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Nuestro blog | Misioneros Claretianos Provincia Bética

El Instituto Nacional de Estadística acaba de publicar (22-6-2015) los últimos datos del Movimiento Natural de la Población, correspondientes a 2014 (datos provisionales). Destaca en el titular de su Nota de Prensa que la esperanza de vida al nacimiento se situó en 83,0 años (80,2 años para hombres y 85,7 para mujeres), la mayor de la serie histórica.

La esperanza de vida a los 65 años también es la mayor de la serie histórica y alcanzó los 21,2 años (19,1 para hombres y 23,0 para mujeres); es decir, se espera que los hombres que han alcanzado los 65 años vivan hasta los 84,1 y las mujeres hasta los 88,0 años. Estas cifras de esperanza de vida indican el número de años que vivirían, en promedio, las personas de una generación sometida en cada edad a la tasa de mortalidad observada en el período analizado.

Aunque cada año se repite que la esperanza de vida es la mayor de la serie histórica (salvo puntuales excepciones) esto no deja de ser un hecho notable, un auténtico logro social, conseguido gracias a la mejora de las condiciones de vida de las personas. Esperamos que en los próximos años se repita el titular.

Nadie sabe exactamente cuándo va a morir, pero se puede hacer una modelización de la mortalidad para conocer qué proporción de personas de cada generación morirá, y cuándo. Esto es de gran utilidad predictiva para la planificación de diversas políticas públicas y para la toma de decisiones personales (planes de pensiones, etc.). Descomponiendo la pirámide de población, de acuerdo a los patrones de mortalidad, se puede saber cuántos años de vida restante le quedan a cada fracción de la población de cada edad, y por tanto se puede pronosticar la desaparición escalonada de cada generación (Ver Método en el BOX abajo).

Esta metodología de descomposición permite comparar además dos momentos históricos, por ejemplo, 1960 y 2013 (último año con tablas de mortalidad disponibles). La intensidad del color de las pirámides, en conjunto y para cada franja de edad, representa la cantidad de años de vida restante: cuanto más oscura, mayor duración de la vida restante y viceversa.

¿Cuándo morirán, por ejemplo, los jubilados?

Como ejemplo de detalle de la descomposición, tomamos la generación de 65 años (umbral de la jubilación, marcada en ambas pirámides), y se trasladan sus cifras de vida restante a la figura 3 para comparar mejor lo sucedido en el último medio siglo; “jubilados” es una licencia pues obviamente no toda la generación de 65 años puede considerarse jubilada dado que muchas de esas personas no formaron parte del mercado laboral o no se jubilaron a esa edad exacta. Puede comprobarse el gran cambio dado entre esos dos momentos históricos en el calendario de la desaparición de la generación. En 1960, al 18% de los hombres (17+1) y 28% de las mujeres (25+3) en esa edad umbral, les quedaban más de 20 años de vida, es decir, morirían con 85 ó más años. Actualmente, estos porcentajes se han más que duplicado: 48% (39+9) y 68% (49+19), respectivamente.

Fuente: Blog Envejecimiento[en-red], 10: junio (2015). ISSN 2387-1512